Yo, otra vez, con el corazon como un queso gruyere.

Es claro, que cuando se trata de esta cosa rara, yo soy la que menos entiende.
Nunca fui buena, ni lo voy a ser, porque, no sirvo para estas cosas, bah, para esa cosa.
No tengo suerte, ni la voy a tener. Me parece que la señora se ríe de mi, siempre. Nunca creí en ella, siempre me burle de su persona, y cuando me desean suerte, me quedo con cara de poker.
Suerte! Qué? Me estas deseando suerte? Y que se supone que viene en una alfombra mágica? Y si no la necesito ahora? Y la quiero para algún día de desgracias? Eh? Qué sabes?
Yo no tengo suerte para nada, no pego una, nunca.
Me parece que esa cosa y la suerte están relacionadas, ya que, en esa cosa tampoco pego una, yo salgo lastimada, siempre. Es algo que no va a cambiar, parece, o no pretende cambiar.
Es tan difícil? Es decir, cómo es que es tan fácil lastimar a alguien así de la nada? Hola, me llamo Ayelén y tengo el corazón roto, re roto, alguien me puede explicar por qué miércoles me pasa esto?
Por qué? Si yo soy una mina felíz, de un día para el otro se caga todo? Cuando todo parece ir bien en una parte de mi vida, la otra se desmorona completamente. Las buenas notas, y aprender miles de cosas nuevas, ser optimista y buena onda y no alcanzan para tapar esto, ojala pudieran.
Cómo es que alguien puede tener el control sobre nosotros? Porque, mas allá de que no entregamos el control como si fuera un paquete de chicles, cómo es que las decisiones de alguien pueden rompernos el corazón? Si, estoy sonando cursi, y me doy asco a mi misma, pero lo cierto es que es parte de esa cosa.
Esa cosa con la que yo era muy felíz sin tenerla. Tampoco sé si la tuve, porque ahora me invaden las dudas, y me pregunto, era verdadero?
Y ahí es cuando empiezo a desconfiar de vuelta, cuando todas las teorías femeninas se tornan verdaderas.
Y vuelvo a desconfiar, de todo aquel que se cruce en mi camino y no tengoa nombre de nena.